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Paul scholes

Era muy fácil ubicar a Paul Scholes en la cancha. El Colorado se imponía en el medio campo con una fiereza absoluta que lo llevó a romper el récord de amonestaciones en el único club en el que jugó en su vida: el Manchester United. A las órdenes de Sir Alex Ferguson, Scholes se convirtió en el jugador inglés con más trofeos en su cuenta personal -11 Premier League, 2 Champions y 3 FA Cups-.

El mejor centrocampista y del que más se arrepentía no haber compartido la cancha, en opinión de Xavi Hernández. Opinión similar de Thierry Henry, el francés goleador del Arsenal.

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Se retiró después de perder la final en Wembley ante el Barcelona -lugar en el que tiene el curioso récord de ser el único jugador inglés expulsado. Considerando que el estadio fue demolido, es el único inglés expulsado en la historia del viejo Wembley. Sin embrago, Ferguson y la gente, y el amor al futbol lo hicieron regresar para jugar una última temporada.

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Sin embargo, una vez que su retiro fue definitivo, algo cambió. Es codueño del equipo de su pueblo natal, el Salford City, y comentarista de futbol. Escribe en The Guardian y ha sacado libros… todo normal para un futbolista retirado. Pero cada que tiene oportunidad, se muestra desencantado con lo que se ha convertido el futbol, al punto de llegar a declarar en su columna que ver futbol de élite ya no se me hace interesante, sobre todo en Inglaterra.

Ha criticado duramente el proceso del equipo de sus amores desde la salida de Ferguson. Louis Van Gaal y José Mourinho han tenido que aguantar sus opiniones. Lo mismo que Paul Pogba, jugador que el Colorado no cree que valga los 120 millones de euros que costó.

Todo es sobre el dinero y los patrocinios en Inglaterra en estos días en lugar de futbol y entretenimiento. Un jugador que era colgado junto con su equipo del travesaño mientras eran fusilados por el entrenador por haberse volteado en la barrera el partido anterior, sabe lo que es sufrir por un equipo. Una visión que probablemente ya se esfumó y que lo aleja de las canchas. No quiere ser entrenador… al menos no todavía. Y es que a pesar de que Scholes se encuentra desencantado con el futbol, hay pasiones que nunca mueren.

Por: Bernardo Otaola / @bernaov

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