El reto del Club Deportivo Muxes va más allá de lo deportivo. Debutarán en la Tercera División profesional de México, la Liga TDP, pero quizá la prueba más difícil sea vencer la discriminación.
“El futbol que nosotros practicamos es un mero pretexto para llamar la atención. Solo con un deporte tan popular daremos voz a la causa”, sostiene Geremías Oleta, presidente del equipo.
Muxes -nombre que viene del tercer género, de la comunidad de hombres que en la región zapoteca de Oaxaca asumen roles atribuidos a mujeres- es el primer equipo profesional de futbol abiertamente representativo de la comunidad LGBTTTIQA (Lésbico, Gay, Bisexual, Transexual, Transgénero, Trasvesti, Intersexual, Queer y Asexual).
El club que nació en 2018, con jugadores de la comunidad, que tenían solo la finalidad de divertirse y crear un espacio que sea seguro y tranquilo para practicar el futbol, se abrirá paso en un país, donde, por ejemplo, tan solo en 2019, se registraron al menos 117 asesinatos violentos contra integrantes de este colectivo.
El reto es grande. En un juego en Cuarta División, categoría que sirvió como piloto para llevar a cabo este proyecto, jugaron ante Politécnico, el año pasado, y ahí fueron insultados. “Nos llamaron ‘equipo de putos’. Hubo malos tratos, pero eso me animó a seguir. No tenemos por qué ser menospreciados”, señala el líder del club.
El cuadro de la Ciudad de México, que nació de forma amateur, quiso reforzar el equipo hace un tiempo, realizó una convocatoria y “nos dimos cuenta que el 95 por ciento eran jóvenes y que querían jugar más allá del esparcimiento”, relata Oleta, por lo que el proyecto se profesionalizó.
En el club hay jugadores que pertenecen a la comunidad, pero hay quienes no y a ellos se les ha concientizado sobre el tema. “Jugadores tienen charlas, desde el significado de las letras LGBTTTIQA, hasta enseñarles la historia, por qué defender la causa”, indica el presidente de Muxes, y agrega: “No hay que ser la causa para ser la causa. Somos aliados. Somos un equipo humanista y vemos que no está bien la discriminación”.
En México, por el momento, ningún futbolista profesional se ha declarado homosexual de forma abierta. Según la Encuesta Nacional sobre Discriminación en México, de 2017, de cada 10 mexicanos, siete consideran que en México no se respetan los derechos de las personas con diferente orientación sexual. La mitad de la comunidad considera que el principal problema a que se enfrenta es la discriminación.
Otro ejemplo: el 64 por ciento considera que “nada justifica” que dos personas del mismo sexo vivan en pareja. En la Ciudad de México ese porcentaje es de 40.5. Además, en solo 19 entidades del país, seis de ellas por orden de la Suprema Corte, permiten el matrimonio igualitario. Y, en cuanto a derechos, son los que menos se respetan en el país.
“La idiosincrasia nuestra no lo permite (que un futbolista ‘salga del clóset’), tenemos una cultura que no nos lo permite. Hay miedo a que los propios dueños de los equipos los rechacen, que las mismas marcas tomen medidas. Los jefes no están tan abiertos en este tipo de temas. Es por ello que vemos que es momento de trabajar estos temas. Los insultos no nos enojan, nos dan la oportunidad de trabajar y darle voz a los millones de la comunidad”, asegura Geremías.
“Debemos ser muy fuertes. Tuvimos un partido contra Irapuato (el 4 de septiembre), de la Segunda División (Liga Premier). Las redes sociales de Irapuato subieron el marcador a Twitter (ganó Muxes 3 a 2). La gente decía perdieron contra el equipo de putos”, recuerda.
“No esperamos la gran aceptación. Seguro dirán ‘vamos contra el equipo de las florecitas’. Nos dan ganas de seguir luchando por la causa. Estamos preparados psicológicamente”, asegura, aunque reconoce que “con los aficionados tendrán que esperar”.
Buscan “dejar en alto el nombre de la comunidad LGBTTTIQA. Sus juegos de local en el estadio Plutarco Elías Calles, en la alcaldía Venustiano Carranza, se transmitirán por internet. “Esperamos llegar a muchas personas”. Enfrentarán su primer partido de la Liga TDP, en el grupo 4, el viernes 25 de septiembre ante Futbol Club Politécnico.
La primera meta, por ahora, “es ganarse el respeto en la cancha”, dice su presidente.
Por: Sergio Bibriesca /@SergioBibriesca