Se tiene la falsa idea de que los atletas de alto rendimiento, en este caso los futbolistas, no combaten los mismos problemas, retos y dificultades que el resto de la población; y bueno, a pesar de que el dinero, la fama y las puertas que se abren cuando eres un ícono del deporte claro que ayudan, todos luchan sus batallas dentro de su propia escala y medida; todos son humanos.
¿Qué es la depresión?
De acuerdo a la Organización Mundial de la Salud, la depresión es «un trastorno mental frecuente, que se caracteriza por la presencia de tristeza, pérdida de interés o placer, sentimientos de culpa o falta de autoestima, trastornos de sueño o del apetito, sensación de cansancio y falta de concentración».
Cabe recalcar que este padecimiento puede llegar a ser crónico o recurrente y dificultar el desempeño para afrontar la vida diaria. En su forma más grave, puede conducir al suicidio. Si es de carácter leve puede tratarse sin necesidad de medicamentos, pero cuando es de carácter moderado o grave se pueden necesitar medicamentos y psicoterapia profesional.
Nuestros demonios, nuestros héroes
-¿Qué impacto tiene la depresión en futbolistas?
En entrevista con Apuntes de Rabona, la psicóloga deportiva del Club Puebla, Claudia Rivas, compartió que, evidentemente, cada caso es diferente, por ende, hay muchos factores que pueden llegar tanto a afectar como a ayudar a una persona, como lo son: su historia, la cercanía o lejanía que tenga con su familia en su vida diaria, etc.
“(Hablando acerca de la realidad que vivimos por el COVID-19) Hay un proceso de duelo que vivimos todos por la pérdida de la libertad y por la empatía por las personas que han fallecido o se encuentran en una situación complicada.
Tristeza que puede vivir un jugador o jugadora por encontrarse en un país lejos de sus familiares. Es un sentimiento auténtico que puede vivir cualquiera y que llevará tiempo lidiar debido a que hay un estímulo en el tiempo.
Hay tres cosas fundamentales con las que lidiamos actualmente:
1.- Tristeza auténtica: Hay que reconocerla y drenarla, restableciendo vínculos con nuestros seres queridos.
2.- Irritación: Al tener la impotencia de no poder realizar nuestras actividades de la manera que habitualmente hacemos.
3.- Trastornos de ansiedad: Se pueden vivir físicamente (taquicardia, ahogo en el pecho, trastornos de sueño).”
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Una de las principales misiones de un psicólogo deportivo es prevenir y trabajar la depresión que puede llegar a afectar a un atleta, incluso en su rendimiento físico. Rivas nos comparte que el mismo hecho de practicar un deporte hace que no se cuenten con tantos casos clínicos, pero que de igual manera:
“Hay trastornos bioquímicos en el cuerpo que generan pensamientos y una conducta depresiva.”
Si se cree que un jugador tiene o puede llegar a desarrollar depresión, se le realiza una evaluación y se busca referirlo con un psicólogo clínico. En ese sentido, la responsabilidad social de los clubes debe de ser tener psicólogos deportivos a su disposición. Profesionales con una trayectoria académica y experiencia en el ámbito laboral que los respalden.
Al hacer esto, pueden llegar a ser la piedra angular de los equipos para brindar un enfoque humano-deportivo, un balance paralelo entre fortalecer a la persona y al jugador.
“Lo que estamos tratando es de prevenirla (depresión), lo que buscamos es realizar técnicas de centrarnos en el presente, mucho trabajo con el manejo emocional a través de la respiración, la relajación, la visualización y estar en constante contacto con ellos”.
Un talento privado de la cancha
-¿La situación que vivimos actualmente (Pandemia de COVID-19) puede llegar a afectar a una atleta?
Entrevistamos a Ana Gabriela Ornelas, médica femenil del Club Toluca, quien indicó que la realidad que vivimos en estos tiempos es muy delicada.
“…El mismo atleta puede llegar a perder motivación por lo que está haciendo. Al pasar por una depresión se pierde el interés, teniendo como consecuencia un impacto en el rendimiento físico”.
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El hecho de que se les prive a las jugadoras (de manera momentánea) de realizar ciertas actividades que usualmente son utilizadas de manera recreativa como lo son: ir al cine o asistir a algún evento social, hasta acciones más importantes como visitar y estar en contacto con su familia, puede llegar a afectarles.
Bajo la misma línea, el hecho de realizar las mismas actividades en el mismo lugar durante mucho tiempo (en este caso semanas o meses) de manera monótona, podría dar como resultado depresión en los atletas. De igual manera, enfatizó que es primordial evaluar cada caso de manera particular.
“Es importante conocer a las atletas, cómo piensan, actúan y trabajan, de esta manera es mucho más fácil identificar cuando algo no está bien, tener un seguimiento completo interdisciplinario es fundamental (entrenadores, preparadores físicos, médicos, psicólogos, etc.”
La atención a los detalles
-¿Cuál es la importancia de la psicología deportiva?
Martha Rosas Contreras, psicóloga del club Pachuca, nos aportó, en sus palabras, la importancia que tiene la psicología deportiva.
“…Darnos cuenta que detrás de un futbolista, existe algo mucho más importante y más frágil, la figura del jugador también tiene importancia, pero la esencia de quién es como persona es fundamental para que la figura pública pueda desenvolverse de forma espectacular”.
Es de vital importancia para la psicología deportiva brindar a las y los atletas elementos suficientes para que a lo largo de su carrera se encuentren en la mejor posición para rendir y se encuentre en óptimas condiciones tanto a nivel personal como profesional.
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En estos tiempos de confinamiento, es el momento indicado para comenzar a trabajar en cada uno de nosotros; y para los atletas profesionales, es tiempo y espacio para plantearse incógnitas que usualmente no hacen.
Por ejemplo, lo que va a pasar con su carrera profesional, cuál es el siguiente paso, estructurar y plantearse nuevos objetivos, entre otras cosas.
“…El hecho de estar pasando tiempo contigo, que usualmente no es algo tan común, provoca una situación complicada de no saber qué hacer. Siempre tienes una rutina, estás ocupado, tienes alguien que te está dirigiendo. Ahora tienes tiempo de estar contigo.
Lo complicado de esto surge cuando no te conoces, no tienes elementos para afrontar tus demonios que siempre han estado ahí pero que por el agitado estilo de vida que llevas no te habían dejado ver.
La idea es aprender, cómo puedes empezar a convivir contigo mismo y reforzar esta cuestión personal. Hoy tienes la oportunidad de conocerte a ti mismo”.
Es tiempo óptimo para valorar los elementos que nos rodean, de esta manera se genera una mayor probabilidad de adaptarnos y superar los retos de la mejor manera posible. Bien dicen que “la crisis es la puerta de la oportunidad”.
Queremos agradecer la participación de (en el orden del texto):
Claudia Rivas (psicóloga de Club Puebla)
Gabriela Ornelas (médica de Club Toluca)
Martha Rosas (psicóloga de Club Pachuca)
Por: Mario Badillo / @n7mariobadillo