Las campanas de la catedral suenan en el corazón de una ciudad que a veces transpira beisbol. E un lugar en medio de progreso, de deliciosa comida y de campos donde el tomate se cosecha de manera fantástica. A unos metros del Estadio General Ángel Flores, entre hits y carreras, entre la Liga Mexicana del Pacifico y la Liga de Ascenso (o a veces La Liga Mx) se encuentra Sinaloa, que florece junto al Río Humaya.
Dorados de Sinaloa: los comienzos
A principios del siglo, las calles de la ciudad y sus habitantes voltearon la mirada a las márgenes del Río Humaya, de donde un colosal pez luchaba contra los anzuelos. Era de gran tamaño y de escamas doradas. Su gran determinación le hizo alcanzar la Primera División al poco tiempo de ser fundado.
Entonces esa feroz criatura de doradas escamas comenzó a rodearse de sabios del futbol que lo ayudarían en su camino, gente que ha enriquecido la historia del club y de Sinaloa.
Dorados de Sinaloa ha contado con experimentados jugadores, como Guadalupe Castañeda, que llegó a enriquecer la defensa y a dar cátedra a las nuevas generaciones. Ya era veterano a su llegada, pero aún así logró ser un referente en su corta estancia en Culiacán.
Jared Borgetti llegó también al equipo de su tierra. Se sentía cerca de casa. Aunque no le fue tan bien, el club cuenta en su historia con uno de los máximos artilleros que ha tenido el futbol mexicano.
En esta ciudad siempre hay tiempo para charlar de futbol: a la hora de la comida o por la tarde, en las escuelas o en las oficinas, donde los “Godínez” comentan con entusiasmo el resultado de «el Gran Pez» o de Tomateros. Siempre hay tiempo para recordar a los grandes héroes, que a veces van a la liguilla de la liga en turno o a la Serie del Caribe.
Los grandes mitos de Culiacán
Desde Tepito también llegó a Dorados de Sinaloa un crack llamado Cuauhtémoc Blanco. Héroe de mil batallas, incansable, genio, diferente, táctico y letal. Los años ya le pesaban, pero fue un motor capaz de ganar una Copa Mx para los de Culiacán. Fue un pistón que revolucionó la maquinaria sinaloense.
También te puede interesar: Jorge Campos: un héroe con traje de surf
Otras figuras fueron Diego Fernando Latorre y Ángel “Matute” Morales, dando un toque sudamericano a las canchas de aquella ciudad. Un Loco uruguayo también pasó por estas fértiles tierras, anotando goles, celebrando eufórico, corriendo por las bandas o buscando un remate mientras los bucles de su melena saltaban junto a el. Así es como la afición recuerda a Sebastián Abreu.
Otro jugador al que se le recuerda es Daniel Osorno, ex juvenil y canterano rojinegro. Su paso por la capital sinaloense fue testimonio de que sus piernas ya no eran como cuando estuvo bajo las ordenes del «Bigotón» en el Atlas.
El catalán de Culiacán
Sin dudas el nivel de personalidades se incrementa cuando hablamos de Josep Guardiola. Dorados de Sinaloa fue un club privilegiado al contar con el catalán en sus filas. Integrante del FC Barcelona histórico de los noventa y que como entrenador actualmente ha conquistado prácticamente todo en Europa, a nivel clubes. Un genio que nació para el futbol y que, junto a Juan Manuel Lillo, tuvo una gran experiencia en Culiacán, donde es recordado con mucho cariño por la afición.
En el mundo del futbol muchos grandes pensadores y grandes sabios solo mencionan dos personajes como “los mejores de la historia”: Diego Armando Maradona y Edson Arantes “Pelé”. Un argentino y un brasileño. «El Gran Pez» tuvo la experiencia de contar con Diego entre sus filas, y de enseñarle un poco del sabor de Sinaloa, de devolverle un poco la alegría por el juego, de jugar dos finales y de ganarse el cariño de aquella región.
Ahora es usual pasear por el centro de Culiacán y encontrar a niños con pasión por el deporte, que portan un jersey del «Gran Pez» en los que se lee “Guardiola” o “Maradona”. Así, se ha convertido en una ciudad que rivaliza entre goles y carreras, entre colores guindas y dorados con vivos negros y azules, una urbe que crece de la mano de Tomateros y Dorados de Sinaloa. Todo lo anterior deja de manifiesto que esta zona es mucho mas que las cosas negativas que a veces se dicen, es una región de progreso y de gente buena.
Por: Carlos Eduardo Silva / @saga0003