El VAR (‘Video Assistant Referee’), chips insertados en los balones para monitoreo, ‘Goal Control’ para evitar goles fantasmas, EPTS (‘Electronic Performance and Tracking Systems’) para medir el rendimiento de futbolistas… Los avances tecnológicos se hacen cada vez más presentes en el futbol contemporáneo.
Mientras esto ocurre en las canchas, las gradas no se quedan atrás. Ejemplo de esto es la implementación de la ‘Fan ID‘, la cual comenzó en la Copa del Mundo de Rusia 2018. En su momento, esta tarjeta le permitió a los aficionados ingresar al país sin visa y acceder a los estadios. Para ello, las personas tuvieron que ingresar su nombre, número de pasaporte, teléfono celular, dirección electrónica, entre otros datos. Los resultados fueron tan “buenos”, que el presidente Vladímir Putin firmó una ley que permitió a los aficionados permanecer en su país hasta el final del año.
Lo que comenzó como una medida para evitar el ingreso de aficionados violentos a una Copa del Mundo evolucionó y, en México, se ocupó para registrar a los aficionados para contrarrestar el grito homofóbico. ¿A dónde va a parar la información recabada? Según el aviso de privacidad para los partidos de la Selección Mexicana, todos los datos que sean recopilados serán almacenados y reservados, dado el “más estricto nivel de confidencialidad”.
Habrá que recordar que Facebook, una de las redes sociales más usadas del mundo, ha sido víctima de hackers que terminan por filtrar los datos de sus usuarios. De igual manera, una empresa como Mercado Libre tuvo un caso de ciberdelincuencia en el que 300 mil usuarios vieron vulnerados sus derechos a la privacidad. Si, por ejemplo, la Federación Mexicana de Futbol sufriera un ciberataque, todos los usuarios que han dejado su información personal, además de sus datos biométricos, estarían en riesgo.
La primera solución
Todo comenzó el 20 de enero del 2022, cuando la Federación Mexicana de Futbol implementó el registro de los boletos para los partidos de la Selección Nacional a raíz de las constantes multas de la FIFA por el grito homofóbico. Los aficionados tuvieron que registrar su boleto previamente en la página que abrió la Federación junto con algunos datos personales, para posteriormente recibir un código QR. El día del partido, con el código escaneado y la información validada, una fotografía a la identificación oficial junto con una “selfie”, fueron suficientes para entrar al inmueble.
Pero, ¿para qué se necesitan los datos? Además de identificar a la gente que ocasiona el grito, la Federación Mexicana de Futbol, a través del aviso de privacidad, aclara que toda la información que recopile solo será utilizada para fines estadísticos y de administración, así como para enviar publicidad y, prácticamente, “concientizar sobre el comportamiento correcto de la afición”. En el mismo anuncio, se menciona que a menos que el usuario no manifieste su oposición para que los datos sean transferidos, se entiende que está dando su permiso, acción que es avalada por el artículo 8 de la Ley Federal de Protección de Datos.
Los datos sensibles, como el estado de salud, creencias, preferencia sexual u origen étnico no serán preguntados, a menos que se dé el consentimiento al momento del registro. La Federación también aclara que en ningún momento se implementará ningún tipo de tecnología de rastreo, aunque mencionan que a través de las ‘cookies’, o los ficheros de la página se obtendrá información personal. Entre los datos que recopilan se encuentran las páginas web que el usuario visita, los vínculos que sigue y su dirección IP, aunque esto puede ser deshabilitado en el menú de un ordenador.
Los riesgos del Fan ID
Pero esto era hasta hace unos días. Con lo sucedido en la cancha de La Corregidora el pasado 5 de marzo, los clubes decidieron implementar el uso del ‘Fan ID’ como medida para identificar aficionados que causen violencia dentro de los estadios. La medida que una vez se ocupó como ayuda para la Copa Mundial de Rusia, se convertirá en el día a día en el balompié mexicano.
En el comunicado de la Liga Mx publicado el 8 de marzo, se menciona que todos los clubes deberán de tener un proceso obligatorio en cuanto la credencialización para los llamados “grupos de animación”. Para la temporada 2022-2023, el Fan ID será obligatorio para todos los aficionados que ingresen a los estadios, además de estar sujetos a sistemas de reconocimiento facial.
José Flores, Presidente de Wikimedia Mx e integrante de la Red en Defensa de los Derechos Digitales (organización dedicada a la defensa de los derechos humanos en el entorno digital), señala la desconfianza de otorgar los datos personales a los clubes que han demostrado tener deficiencias en materia de seguridad, además de que estos pueden estar asociados a otros negocios, como posiblemente tener vínculos con el crimen organizado (la historia del futbol mexicano ha comprobado esto último).
Aunado a ello, todos los datos que recopilen los clubes serán compartidos con la ‘Plataforma México’, una base de datos gubernamental donde se vacía la información de las personas que han tenido antecedentes penales. En cuanto otorgues tu información, esta será transferida a dicha plataforma.
Tuvimos un programa especial en nuestro canal de Youtube dedicado a este tema, no te lo pierdas:
Datos biométricos, ¿una amenaza?
El reconocimiento facial parece una solución viable para identificar a las personas violentas, sin embargo, diversos analistas la catalogan como un riesgo al recabar rostros y compararlos en una base de datos. De entrada, el poner un rostro con todos los datos que ya se han proporcionado, rompe con el principio de presunción de inocencia. Una imagen vale más que mil palabras y, al tener un “rostro” en una acción negativa, se coloca a la persona como culpable sin más, una de las estrategias punitivas características de nuestros sistemas de justicia.
Y no se ha hablado de lo peligroso que puede ser que una empresa privada tenga el acceso a la información vital del usuario. En Estados Unidos se ha ocupado el reconocimiento facial para identificar a gente en las marchas y, después de cierto tipo de acciones, ponerlas bajo arresto, todo con la ayuda de la tecnología.
A esto hay que añadir el nivel de eficiencia que tendrán las cámaras. La revista Proceso declaró que Seguritech, empresa de videovigilancia en la Ciudad y el Estado de México –que además está presente en el estadio Nemesio Díez–, ha recibido varias denuncias por su mal o nulo funcionamiento, a pesar de las múltiples ganancias que presenta. Dicho sea de paso, la instalación de dichas cámaras en el inmueble fue anunciada el pasado 11 de marzo, es decir, los aficionados que asistieron desde que el Nemesio Díez fue remodelado, han sido monitoreados sin su consentimiento.
La implementación de los datos biométricos se dio como una respuesta a lo sucedido en la cancha de La Corregidora para poder identificar a todas estas personas que causen algún tipo de violencia, pero Karla Prudencio Ruiz, abogada y especialista en autonomía tecnológica, comunicación comunitaria y derechos digitales, considera que si bien lo visto en Querétaro fue una violencia terrible, no considera que la identificación de los agresores haya sido un problema.
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Relación calidad-precio
Luis Fernando García, director de la Red en Defensa de los Derechos Digitales (R3D), a través de Twitter, comentó que la tasa de error de estos sistemas de reconocimiento facial llega hasta el 95% con cierto tipo de rostros, como los de las mujeres o personas de tez morena. Para evitar los reconocimientos fallidos habría que mirar otras opciones. El estudio “Sports Stadiums and the Normalization of Biometric Monitoring”, declara que la mejor tecnología tiene un costo estimado de entre 200,000 y 250,00 dólares. Un costo difícil de alcanzar; ¿quién lo terminará pagando? ¿De dónde sacarán ese dinero los clubes? Parece que de los bolsillos de los aficionados.
El nivel de eficiencia de las cámaras también depende de ciertas condiciones. Una foto de frente en la taquilla será prácticamente perfecta, pero dentro del estadio, con la gente gritando, con personas pintadas o hasta cubiertas del rostro, podría ocasionar que los falsos positivos incrementen. En resumen, para tener una tecnología más certera, habrá que invertir más dinero. Con esto, ¿a quién se excluye del futbol y se criminaliza de antemano?
¿De dónde va a provenir ese nivel de capital? Los clubes tendrán que recurrir a un aspecto muy simple: incrementar precios. De acuerdo a Worldfootball, la asistencia a los estadios durante el torneo regular del Apertura 2019 fue de 3.897.906 asistentes, más de la mitad que en el Apertura 2021, donde 1.656.487 personas asistieron a los recintos deportivos.
En lo que va del Clausura 2022, la asistencia ha mejorado, teniendo hasta el momento 1.507.010. Sin embargo, cabe resaltar el caso de Cruz Azul, equipo que ha presentado una entrada de 115.518, el tercer lugar en cuanto asistencia de acuerdo a la Liga BBVA, pero que ha implementado paquetes de hasta cuatro partidos con costos de $150 a $450, o durante tres jornadas con valores de $50 a $700, y presentó su boletaje más bajo en la jornada 10 contra los Pumas, día en que subió sus costos a un rango de $500 a $1500.
¡Estamos EN VIVO! @lalaprudencio y @padaguan , integrantes de @R3Dmx , nos dan su perspectiva sobre los derechos digitales de la afición y cómo estos pueden ser vulnerados por la FMF y por la Liga Mx.
Si tienes pensado ir a estadios, esto te interesa🧵https://t.co/R1LXvmg1qV
— Apuntes de Rabona (@ApuntesdeRabona) March 22, 2022
La pelota sigue rodando
Aun así, y confiando en las buenas intenciones de las autoridades por identificar a los aficionados responsables del grito homofóbico o de la violencia, existe la posibilidad de solicitar el acceso, la rectificación o cancelación de los datos, esto de acuerdo con los derechos ARCO, los cuales son derechos de acceso, rectificación, cancelación u oposición y sirven para saber la información registrada, la actualización, la cancelación y la suspensión de la misma.
A pesar de que la idea de poder suspender los datos en caso de ser “fichado” puede parecer real, la misma Federación tendrá que analizar la solicitud y dar la respuesta pertinente, por lo que la posibilidad de que alguien pueda utilizarlo para evitar sanciones se ve reducida.
Pero mientras todo esto ocurre, la pelota sigue su rumbo. Equipos como Atlas ya implementaron el FAN ID en la jornada 11 del campeonato nacional, mientras el siguiente duelo de la Selección Mexicana está más cerca y, con ello, el nuevo registro para ingresar al estadio Azteca.
Por: Miguel Bustamante