La selección inglesa llegó con una cantidad de bajas importantes pero ni eso terminó por ser suficiente como para descartarlas del título. Al menos eso fueron demostrando ronda a ronda, donde sí, desde fase de grupos tuvieron partidos difíciles de afrontar pero que según la exigencia del partido, fueron creciendo. ¿Qué ha hecho Sarina Weigman para sacar adelante el barco inglés? ¿volverán a traer una copa a su país? Vamos con ello.

El título que abrió el camino 

La FA (Asociación inglesa) creó en 2020 un plan dinámico para buscar potenciar su futbol en todas las categorías, desde infantiles, juveniles y selección absoluta. Un camino largo pero que ha ido dando sus réditos desde la apuesta por ser un referente en el futbol femenil, 

Todo se consumó con Chloe Kelly anotó en el minuto 110’ el gol que le dio su primera Eurocopa a Inglaterra. En ese equipo había nombres como Fran Kirby, Beath Meade y Leah Williamson. Tres pilares fundamentales para la selección. Por lo que no tenerlas siquiera como opciones, daba pie para pensar en que tan lejos podrían llegar. Ni siquiera hablando de una final, si había posibilidades reales para una selección que dejó una nota alta en dicho torneo.

“La visibilidad es clave para una Federación que establece programas de crecimiento cada tres años. En el ciclo 2017-2020 ha superado todas sus expectativas. La creación de una aplicación para ver todos los partidos, FA Player, la apertura de grandes estadios y la incorporación de nuevos patrocinadores han multiplicado el interés, aumentando considerablemente tanto la asistencia como la audiencia.»

• Récord de liga con 38.262 espectadores en un Tottenham – Arsenal (2019)
• Récord de un partido internacional con 77.768 espectadores en el Inglaterra – Alemania (2019)
• 3.072 espectadores de media en partidos de liga (+174% respecto a 2016)
• FA Player: más de 100.000 suscriptores en la primera temporada.
• 11,4 millones de espectadores en la semifinal del Mundial 2019.

Sue Campbell, directora del fútbol femenino en la Federación (FA), alerta de que este es solo el inicio del camino. «Tenemos que retar el status quo y hacerlo con creatividad y constancia», cuenta en uno de los informes de la FA. «Ir a un partido de fútbol debe ser una experiencia familiar. Vamos a desarrollar programas de iniciación en escuelas y fomentar el desarrollo con campañas de marketing y comunicación». Para comenzar, en 2019 igualó el salario de hombres y mujeres cuando acuden a jugar con su selección.”

Vía Newtral

El camino a renacer

Es muy probable que a la selección que más le complicaron los partidos fue a la inglesa. Su primer rival fue Haíti, compactando espacios evitó caer por más goles, claro, sumado a la actuación de su arquera, después llegó Dinamarca para otro 1-0 cerrado, con pocas chances pero la clasificación en la bolsa para sentirse con mayor tranquilidad,

El 6-1 ante China, salió muy caro, llegó otra pérdida que prendió todas las alarmas de nuevo. Keira Walsh salió lesionada tras una acción y eso terminó por complicar cieras aspiraciones para la escuadra inglesa.

Para ese punto, Sarina Weigman, tuvo que intervenir de cara la fase eliminatoria, cambió el esquema para ayudar de nuevo a empujar a su selección.

Entonces llegó el juego más complicado, no quiere decir que en las siguientes selecciones no encontraran un camino sencillo, sino que Nigeria mostró un mejor plan, uno que alargó la agonía de Inglaterra, que dicho se de pasó cerca del final del tiempo reglamentario, perdió a su estrella, Lauren James, por una desconexión del partido que le costó la expulsión.

El juego terminó con la tanda de penales, donde se notó la etiqueta de selección grande, porque vaya, sin duda en algún punto se pudo haber quedado fuera del mundial pero cuando tienes esa forma de competir ante ciertas situaciones de adversidad, un intangible que se adhiere, logras salir adelante de juegos así. Aunque también necesitas un puntito de calidad, como el del cobro de Chloe Kelly o las salvadas de Mary Earps.

Ante Colombia fue algo similar, si bien el juego fue un tanto trabado y el gol que encuentran las inglesas parte más por un error rival y posteriormente Alessia Russo marca la diferencia entre hacer un buen partido colectivo y saber conseguir el pase de ronda, es una muestra importante de lo que son capaces de realizar. 

Australia fue el último escalón para sortear. Estadio en contra pero una selección que en estructura no iba a resistir a lo que podía tener enfrente. Toone, Russo y Hemp fueron artífices de llevar a su selección a otra final pero esta vez, a una en el escenario mundial.

arina Weigman, la capacidad a la orden del día

La entrenadora neerlandesa ha demostrado no solo con Inglaterra sino con Países Bajos de la capacidad que tiene. Prácticamente ha disputado cada final por torneo que dirige, lleva dos Eurocopas ganadas y la final del mundial pérdida en la última competencia. 

El esquema base pasó de un 4-3-3, que en realidad daba por mayores lapsos a un 4-2-31 con balón a mudarse completamente tras la lesión de Walsh. Sarina volvió a lo que utilizó en Eurocopa, 3-4-1-2 para darle soltura a sus ofensivas e intentar tener el equilibrio en el mediocampo y también al exterior. 

Analizando un poco las virtudes de Inglaterra tenemos: 

• Un equipo hibrido. ¿Qué significa? Que no tiene como tal un estilo definido, puede o no atacar con balón en posesiones largas. Lo que le ayuda a ser menos predecible. 
• Variación. Si bien la línea de 3 necesita mejores conducciones desde la salida y encontrar opciones con sus centrocampistas, no es tan necesario por la búsqueda de juego exterior que tienen. 
• Calidad para castigar. La selección inglesa no necesita de la fase sino del momento y eso es vital. Si en un balón largo Lauren Hemp baja y asiste al desmarque de Russo, se crea un gol. 
• Mary Earps sin duda ha sido la base de mantener en cero el arco. Solo 3 goles recibidos pero también una solidez defensiva cuando están en bloque bajo. 

Pérdidas de Inglaterra ante Nigeria. Perdió bastantes duelos en situaciones del extremo del campo. Vía @Odriozolite

¿Vuelve a casa? 

Desde 1966 Inglaterra no es campeona del mundo. Las Lionesses están a nada de traer a casa una copa de este calibre para sus vitrinas. 

Estuvieron cerca en dos ocasiones, 2015 y 2019 las vieron caer en semifinales pero para esta edición y tras anteponerse a muchas cuestiones. Llegan como las favoritas a coronarse. 

De ser así, demostrarán lo que significa apostar por el fútbol femenil y querer llevarlo a otro nivel con la gente capacitada y buscando posicionarse.