El camino de José Manuel de la Torre por los campos de futbol terminó un 1999, con Necaxa. Tuvo la oportunidad de defender algunas de las camisetas más representativas del balompié mexicano, como Chivas o Cruz Azul, además de ser parte del combinado nacional que ganó la Copa Oro en 1991.
Incluso dio el salto al otro lado del charco para vestir los colores de Real Oviedo durante una temporada. Con tres ligas locales y un título internacional en sus hombros, parecía que su relación con la pelota ya había dejado sus mejores años. Sin embargo, esto estaba por verse.
Los inicios de José Manuel de la Torre en el banquillo
Comenzó de manera discreta, pero al lado de entrenadores de renombre. Antes de tomar las riendas de un club, fungió como auxiliar técnico de figuras de la talla de Manuel Lapuente o Leo Beenhakker durante su estancia en el América. Curiosamente, fue el acérrimo rival de las Águilas quien le dio la primera oportunidad al frente de un equipo. Llegó a Chivas en el Clausura 2006, en la jornada once luego de la salida del neerlandés Hans Westerhof. Aquella temporada logró meter al Guadalajara en la Liguilla, donde el futuro campeón, Pachuca, los dejó fuera en semifinales.
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Para la siguiente temporada el debutante entrenador tuvo algunos problemas de arranque. El ingreso de los rojiblancos a la Liguilla se dio gracias al repechaje, ya que quedaron como tercer lugar de su grupo. A pesar de estos antecedentes que podrían ser síntoma de una salida prematura, Chivas dejó en el camino al superlíder Cruz Azul y a las Águilas del América, para enfrentarse a los Diablos Rojos en la final. Un gol de Adolfo Bautista al minuto 69 en el partido de vuelta los hizo campeones.
Para dimensionar el logro que supuso este campeonato para el novel entrenador, se debe decir que desde 1997 Guadalajara no se coronaba en la Liga. No sólo esto. Si se mira atrás, el título anterior se debe rastrear hasta la temporada 1986-87. La distancia temporal entre estas ligas sólo podía magnificar la victoria obtenida por “El Chepo” en tan poco tiempo. A pesar de esto, terminó por ser cesado del Guadalajara en el Apertura 2007.
La gloria en el infierno
Su siguiente oportunidad llegó precisamente del club al que le arrebató el título: Toluca. Anunciado a mediados de 2008, luego de que José Néstor Pekerman dejara a los choriceros, tuvo en este equipo quizá su mejor época. Una vez más se hizo con el título de liga en su primer torneo al frente del club. Con un equipo en el que militaban jugadores como Hernán Cristante, Héctor Mancilla o Zinha logró llegar hasta la final, donde se enfrentó a Cruz Azul, llegando hasta los penales. Ahí, todos anotaron su tanto, excepto Alejandro Vela por parte de los cementeros.
Para los siguientes torneos fue en una constantes en liguillas, consiguiendo el liderato en puntos en el Apertura 2009. Para el Bicentenario 2010 llevó a los Diablos a la final una vez más, en esta ocasión frente a Santos. Por segunda ocasión tuvo que decidirse el campeón en penales, donde Toluca salió victorioso de nuevo.
Todos los antecedentes anteriores hicieron que las miradas se posaran sobre él cuando el Mundial de Sudáfrica 2010 terminó. Javier Aguirre renunció a la dirección técnica del Tri y José Manuel de la Torre aparecía como un candidato natural a la vacante. Tres campeonatos nacionales con sólo dos clubes en su historial lucían como una gran carta de presentación.
El desplome del Tri
Tuvo un arranque prometedor. No conoció la derrota durante catorce encuentros, además de que se hizo con la Copa Oro en 2011. Todo parecía indicar que la cosecha de títulos por parte del “Chepo” no se limitaría a los torneos locales. Sin embargo, cuando los clasificatorios para el Mundial llegaron, las cosas comenzaron a complicarse. Para Brasil 2014, la Concacaf recibió un total de 3.5 lugares. El cuarto sitio se decidiría frente un conjunto que fuera parte de la OFC.
México terminó en el cuarto lugar de la clasificación del hexagonal, por debajo de Estados Unidos, Costa Rica y Honduras. José Manuel de la Torre fue cesado en septiembre de 2013, frente a los desastrosos resultados que hacían peligrar la participación de la Selección Nacional en el Mundial.
El retorno
Luego de su caída al frente del Tri, pasó casi un año sin dirigir. Fue hasta octubre de 2014 que fue llamado a un club en el que ya había vivido viejas glorias: Chivas. En esta ocasión su misión estaba lejos del título. Debía evitar que los rojiblancos abandonaran la Primera División. El Torneo Clausura 2015 pareció demostrar que si bien el “Chepo” no había logrado triunfar a nivel de selecciones, seguía sin perder el toque a nivel local: Guadalajara ingresó sin problemas a la Liguilla, llegando hasta semifinales, donde Santos, futuro campeón, terminó por eliminarlos.
Por desgracia sólo fue una ilusión. Para el siguiente torneo los números comenzaron a menguar, lo que ocasionó que fuese cesado. Su siguiente club fue Santos. Llegó a la Comarca Lagunera en agosto de 2016, sin embargo en este club tampoco consiguió afianzarse. Con 38 encuentros dirigidos en fase regular con su nuevo club, solamente consiguió cosechar diez triunfos, dieciocho empates y otras diez derrotas. Salió del club en septiembre de 2017.
Quizá su llegada a Toluca suponga el retorno de las viejas glorias para José Manuel de la Torre. Además de esto tiene tras de sí la estela de los malos resultados conseguidos por La Volpe, lo que no hace sino dejarle el camino listo para alzar el vuelo de nuevo.
Por: Alberto Roman / @AlbertoRomanGar