Para el hincha de futbol, la historia de su club es muy importante, es el eje medular de la identidad. Como sucedió comúnmente con la fundación de varios equipos, las asociaciones de personas -en algunos casos empresas e instituciones educativas- fueron quienes organizaron los equipos de futbol que posteriormente adquirirían características, tradiciones y hábitos propios adheridas al paso del tiempo.
Dentro de esas comunidades no se puede descartar el aspecto religioso como un elemento de la historia de los clubes. Ejemplo claro de esto son aquellos que se vieron influenciados por la comunidad judía, o porque el equipo se instauró donde hubo una fuerte presencia de inmigrantes con tal distinción o bien porque algunos judíos contribuyeron a sus escuadras.
Es importante señalar que los “antecedentes” judíos en los equipos han sido motivo de burla, violencia y racismo por parte de los hinchas de otros clubes. En ocasiones se ha defenestrado a la comunidad judía que no tiene nada que ver con futbol, la cual ha expresado su reprobación ante ese tipo de actos. Hay que dejar en claro que su culto como tal no se hace manifiesto dentro del campo, sea porque los judíos no participan de dicha actividad, sea porque los aficionados, aunque no profesen tal religión e incluso podrían ser cristianos o ateos, sí reconocen la influencia de aquella en la historia del equipo.
En ningún modo se hace proselitismo de las creencias religiosas, solo se intenta mostrar parte del pasado de algunos equipos en los que de alguna forma está presente dicha colectividad. A continuación, de manera muy sintética se muestran los casos en que se refleja la herencia judía en el futbol.
Club Atlético Atlanta (Argentina). Establecido en el barrio de Villa Crespo en la Ciudad de Buenos Aires, Atlanta, nombre homónimo de un equipo italiano, tuvo contacto con los inmigrantes judíos que se establecieron en esa zona de la ciudad. El historiador Raanan Rein publicó en 2012 su libro: Los Bohemios de Villa Crespo. Judíos y Futbol en la Argentina, donde explica que el futbol fue una parte importante para la integración de los extranjeros en el país sudamericano.
En una entrevista para el diario argentino Clarín, el académico mencionó que: “Lo que interesa en Atlanta es que no se trata de una institución judía, sino de un espacio único en donde interactuaron siempre judíos con no judíos, afiliados a instituciones comunitarias con no afiliados, askenazíes con sefaradíes, comunistas con sionistas.”
Ajax (Holanda). La ciudad de Ámsterdam es una de las más importantes de los Países Bajos. En ella no solo se puede hallar vida nocturna y consumo legal de marihuana, también se pueden encontrar vestigios de la fuerte presencia judía. El Ajax, es clave para entender esto ya que el club puede ser considerado como una escuadra de la simpatía de la comunidad judaica holandesa, al menos en el siglo XX. Se dice que los comerciantes judíos cerraban temprano cada que los rojiblancos iban a disputar un partido.
Te puede interesar: Ajax y su entrada al futbol moderno
Sin embargo, la llegada de Hitler al poder cambió las cosas para Ámsterdam que fue una de las ciudades donde llegaron los nazis. En 2005, los directivos solicitaron a los fans del Ajax que dejaran de mostrar símbolos como la estrella de David, ya que eso provocaba cánticos antisemitas por parte de otros hinchas, lo que provocó la polémica entre religión y futbol, así como el descontento de israelíes.
Bayern München (Alemania). En el siglo pasado, el Bayern era conocido como “el equipo de los judíos”, que ya desde entonces daba signos de lo que sería su futuro lleno de glorias. Tal referencia no es extraña cuando se recuerda que entre quienes lo fundaron había dos judíos, Josef Pollak y Benno Elkan. En suma, el equipo bávaro también sufrió la instauración del nazismo en 1933, en este aspecto se suele señalar al presidente del club, Kurt Landauer como uno de los tantos que tuvo huir de Alemania. En la actualidad se recuerda como un personaje importante para el club de Múnich.
El Bayern, para ese entonces disfrutaba de buena reputación y de los campeonatos obtenidos. El más fresco obtenido en 1932 por el director técnico, Richard Dombi (judío). Desde entonces y hasta después de que terminó la guerra, el Bayern Müchen decayó considerablemente. En 2016, se desató una polémica por un artículo publicado por Markwart Herzog que afirmaba que fue voluntad del equipo adaptarse al nuevo Estado y no se vio obligado a seguir las órdenes del régimen como se dice comúnmente. Sin embargo, lo anterior queda abierto al debate histórico.
Tottenham (Inglaterra). La escuadra londinense es también uno de los equipos que luce en este aspecto. Aunque no queda claro cuáles son los tan mencionados “orígenes judaicos” de los Hotspurs que propios y extraños refieren, lo cierto es que a sus seguidores se les relaciona con el judaísmo.
Lee más: Mauricio Pochettino, argentino revolucionario
Hay que decir que el Tottenham se encuentra cercano a uno de los barrios donde hay una alta presencia de judíos, sin embargo, esto no lo hace necesariamente un club para dichos feligreses. Aunado a esto, el dueño del club, Daniel Levy, es de ascendencia judía, lo que acrecienta la etiqueta. En este caso los cánticos antisemitas no se han hecho esperar, principalmente por los aficionados del Chelsea y del West Ham.
Al respecto los fans del equipo blanco se autodenominaron como Yid Army (ejército judío) ya que el término yid es usado despectivamente para referirse a tal comunidad, pero en realidad es una lengua derivada del hebreo que tiene influencias del alemán y data de la Edad Media.
¿Quieres saber más sobre religión y futbol? Checa este video
Por: Moisés Anaya
Buenas tardes, me gustaría dar lugar a una “fé de erratas”. El Club Argentino de la B Nacional que mencionan con influencias judía, lleva por nombre “Atlanta”, no Atalanta como mencionan en repetidas ocasiones en el texto. Que buen escrito sobre le comunidad judía en el fútbol. Saludos cordiales.
Gracias, Raúl. Lo corregimos.