Mesut Özil se ha convertido en uno de los futbolistas más polémicos en la última década. Ya sea por sus sobresalientes habilidades demostradas en equipos como Real Madrid, Arsenal y, por supuesto, en la Selección Alemana o por sus “incendiarias” declaraciones respecto a problemáticas políticas y sociales, no hay forma en la que el gunner pase desapercibido.
El 10 contra la censura
Özil, jugador alemán, de ascendencia turca y que profesa la religión musulmana, se dio a la tarea de alzar la voz en contra de la represión que el gobierno chino ha ejercido sobre los uigures.
Los uigures son una de las 55 etnias que se encuentran en China (particularmente en el territorio de Xinjiang), quienes profesan la religión musulmana y su lengua es de origen turquico y alfabeto árabe. Esta etnia, que también tiene presencia en países de Asia central como lo son: Kazajistán, Kirguistán y Uzbekistán, ha sufrido de discriminación, maltrato y persecución durante varios años por parte del gobierno chino. Incluso se han creado campos de concentración donde se estima que más de un millón de personas de esta y otras etnias han sido retenidos debido a sus creencias musulmanas.
Múltiples versiones
El gobierno chino argumenta que estos campos en realidad son “centros de transformación mediante la educación voluntaria”. No obstante, testimonios que han sido rescatados de estos centros han denunciado maltratos como privación de alimentos e incluso palizas.
También se habla acerca de técnicas de lavado de cerebro y la repetición sin parar de propaganda ideológica con la intención de “reeducar” a quienes se encuentran en estos centros.
Incluso, el Comité de la Organización de las Naciones Unidas para la Eliminación de la Discriminación Racial, ha comprobado la existencia de mil 200 campos de “reeducación” donde se retienen a estas minorías.
De igual manera, señaló un sistema de vigilancia en masa, el cual incluye información y datos personales mediante tecnología, y está dirigido de manera desproporcionada contra los uigures. Al mismo tiempo, actos de hostigamiento como detenciones por parte de la policía y escaneos de sus teléfonos móviles.
Falta de respaldo de los Gunners
“Queman sus Coranes. Cierran sus mezquitas. Prohíben sus escuelas. Matan a sus hombres santos. Los hombres son obligados a internarse en campos y sus familias se ven obligadas a vivir con hombres chinos”. Declaración que forma parte de un texto publicado por Özil dentro de sus redes sociales en diciembre de 2019. De igual manera, el alemán invitó a la etnia uigur a: “resistir la persecución”.
Después de las declaraciones del crack del Arsenal, el club londinense decidió deslindarse completamente del asunto. Los Gunners externaron a través de un comunicado que “El contenido comunicado es una opinión personal de Özil. Como club de futbol, el Arsenal siempre se ha adherido al principio de no involucrarse en política”. Expresó el equipo, demostrando una falta de apoyo a su jugador.
Varios medios de comunicación acusaron al Arsenal de abandonar a su jugador pensando solo en el dinero. Tomando en cuenta que en ese momento China firmó un contrato de transmisión con la Premier League por alrededor de 540 millones de libras.
Censura desde China
El gobierno chino declaró que el jugador había sido engañado por “noticias falsas”. Sin embargo, el asunto no terminó ahí. La Asociación de Futbol de China calificó las declaraciones de Özil como “inaceptables” y la figura del 10 fue removida de los videojuegos Pro Evolution Soccer (PES) y FIFA en su versión china.
Las autoridades chinas también bloquearon su cuenta de Weibo (red social china) que contaba con más de 4 millones de seguidores. Por último, el gobierno chino ordenó que no fuera transmitido el partido entre Arsenal y Manchester City (diciembre 2019) donde Mesut Özil fue titular por parte de los Gunners.
Independientemente del rendimiento deportivo del jugador, sería ingenuo pensar que el evidente distanciamiento del club londinense con el que ha sido una de sus mayores figuras en la última década no está relacionado con sus declaraciones. Puede que “El rey de las asistencias” haya perdido al equipo de sus amores, pero no perdió el amor por su religión, ni su libertad de expresión.
Finalmente, en enero de 2021, se dio a conocer su partida de Londres, y su fichaje por el Fenerbahçe de Turquía. El 2 de febrero de 2021, debutó con “los canarios amarillos” en la victoria 2-1 frente al Hatayspor. Al término del partido expresó su felicidad por haber firmado por el cuadro turco: «Jugar mi primer partido con el Fenerbahçe es una sensación increíble…”
Por: Mario Badillo / @n7mariobadillo