Uno de los episodios que demuestra de manera transparente en qué condiciones tenían que vivir las mujeres es lo sucedido en Inglaterra durante la Primera Guerra Mundial. Los obreros de las fábricas abandonaron sus puestos laborales para ir a combatir al frente, lo que ocasionó que las mujeres ocuparan esos sitios en la industria. Pronto los partidos de futbol y sus torneos, que eran muy comunes entre los obreros, pasaron a ser protagonizados por las trabajadoras, lo que generó una masificación de este deporte entre las mujeres.
Desgraciadamente con el fin de la guerra la FA (la Asociación Inglesa de Futbol) no reconoció al futbol femenil, con todo y que para ese momento ya contaba con una popularidad importante entre el público femenino. Uno puede pensar que esta historia es parte de un pasado lejano, pero tristemente no se encuentra tan lejos. Hasta 1971 las mujeres tenían prohibido jugar en instalaciones de la Football Association. Por esta razón, nos parece que el futbol femenil es un testimonio paradójico: su abrumadora desigualdad deja de manifiesto las dificultades por las que han atravesado y todavía atraviesan las mujeres, mientras que el hecho de que siga ahí y logrando cada día más conquistas, muestra los grandes avances que se han dado en pos de la igualdad. Por esta razón te dejamos a nuestro once histórico del futbol femenil.