Algunos afirman que: los porteros suelen ser buenos directores técnicos, pues ven cómo se desarrolla el juego y los movimientos de los jugadores. Esta aseveración es una verdadera loza para quienes ya cargan con la responsabilidad del arco. En el caso de Robert Dante Siboldi, el exarquero trata de hacerse paso en el efímero gremio de la dirección técnica del futbol mexicano, pero ¿tiene las credenciales suficientes?
Debajo de los tres palos, Siboldi fue ídolo
Originario de Montevideo, Uruguay, Robert Dante Siboldi tuvo que demostrar su talento a temprana edad. El Ángel, como lo conocían, debutó a los 18 años en Peñarol. Lo hizo en 1983, mismo año en el que Peñarol llegó a la final de la Copa Libertadores que perdieron con Gremio. Dos años después Siboldi fue campeón de en el futbol uruguayo, cosa que se repitió en 1986.
De hecho, en 1987 a Robert Dante Siboldi le llegó la revancha en la Copa Libertadores, ya que Peñarol resultó campeón del certamen. En tres años el arquero vivió tres campeonatos en su país natal. Al siguiente año le llegó la internacionalización, pues se marchó a Gimnasia y Esgrima La Plata, donde la regularidad no lo acompañó.
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Sin embargo, esto no lo detuvo, y decidió probar suerte en tierras aztecas. Siboldi llegó a México en 1989 para jugar con Atlas, con la Academia se mantuvo 108 encuentros: tres temporadas. Durante su estancia fue reconocido como el mejor arquero de la liga en el año 1990. Después de su travesía en la perla tapatía Robert Dante Siboldi se tomó un año sabático.
El arquero regresó al máximo circuito en 1993 cuando fichó por Cruz Azul con ellos solo se mantuvo durante un año, aunque regresaría más adelante al equipo. Después vino Tigres, donde vivió un campeonato y un descenso. Posteriormente vino la debacle de su carrera, Argentinos Jr, Atlético Junior y Gavilanes de Nuevo Laredo.
A pesar de que los últimos años de Robert Dante Siboldi no fueron los mejores, su carrera en México le bastó para hacerse de un renombre, incluso se convirtió en el ídolo de jugadores como Guillermo Ochoa. ¿Qué seguía en la carrera del uruguayo? Poner a prueba la reflexión con la que abrimos el texto.
Claros y obscuros en el banquillo
Siboldi se inició como entrenador en el área en donde más se sentía cómodo, pues en Zacatepec, Irapuato, y Cruz Azul Oaxaca se integró al cuerpo técnico para encargarse de la formación de los porteros. Después de su estadía en Oaxaca, Robert Dante Siboldi regresó oficialmente a Cruz Azul, escuadra donde se encargó de instruir al héroe de mil batallas: Óscar el Conejo Pérez.
En 2005 dejó el rol de formador de lado para iniciarse como Director de Fuerzas Básicas de Cruz Azul. Posteriormente llegó su primer reto en el banquillo, lo hizo en segunda división con Cruz Azul Jasso, equipo al que hizo campeón en 2007. Dos años después Siboldi obtuvo su primer reto en el máximo circuito del futbol mexicano. Tras el cese de Benjamín Galindo el uruguayo ocupó el interinato del club. Tan solo dirigió dos partidos.
En 2011 y después de trabajar en Monterrey como entrenador de porteros, tomo las riendas de Dorados de Sinaloa, a quienes dirigió solamente en el Clausura 2012. Tras dos años en los que no estuvo en la escena del futbol, Siboldi se unió en 2014 al cuerpo técnico del Club Santos Laguna como Director de la Fuerzas Básicas.
De hecho, su etapa en el cuadro de la laguna fue la que lo catapultó a los primeros planos en la Liga Mx. Su primer acercamiento con la gloria fue en 2015, cuando lo designaron como interino tras la salida de Pedro Caixinha.
En 2017 llegó la oportunidad para dirigir en primera, Robert Dante Siboldi fue presentado como el estratega de Santos Laguna, venía a suplir a un desgastado Chepo de la Torre. Lo sorprendente del caso fue el éxito del uruguayo. El club no resintió la salida de su estratega, sucedió todo lo contrario, pues los guerreros fueron campeones del Clausura
Desgraciadamente lo bueno dura poco, más en la Liga MX, y los problemas en el vestidor (en específico con Gerardo Alcoba) produjeron que el club le diese las gracias al estratega campeón. ¿Qué seguía en la carrera de Robert Dante Siboldi? Tal vez uno de los peores retos que podría elegir.
El estratega aceptó dirigir a Veracruz, uno de los clubes con los peores manejos que ha visto el futbol mexicano. Evidentemente Siboldi no pudo hacer mucho por mejorar al club y su estadía era la crónica de una muerte anunciada.
El 16 de abril de 2019, Siboldi presentó su renuncia y dejó el puerto. Meses después su nombre comenzaba a rondar en la Ciudad de México, Robert Dante Siboldi puede llegar a Cruz Azul se comentaba en la prensa. En el papel, esto significaba la mejor oportunidad de su carrera.
Sin embargo, el entorno de la Máquina se convirtió verdaderamente en un espectáculo, uno barato por cierto, y lo que tendría que ser su entrada triunfal a un equipo protagónico, terminó siendo el resultado de un pleito de poder al interior del club.
A pesar de que parecía que tendría buen paso y estaba cerca de llevar al Cruz Azul a una nueva final, terminó por descarrilarse y perdió ante Pumas de una forma impensable, pues después de ir ganando 4-0 en el juego de ida, los Cementeros recibieron 4 goles en Ciudad Universitaria. En el global empataron, pero por posición en la tabla Pumas pasó.
Aquel juego resultó ser el último como timonel Azul, pues Siboldi presentó su renuncia. En la actualidad, el uruguayo es técnico de Xolos de Tijuana, equipo con el que fue presentado el 19 de abril de 2021. Si las cosas vuelven a tomar un buen camin, tal vez la gente diga: sí, los porteros son buenos técnicos, ahí tienes el caso de Siboldi.
Por: José Macuil García