El Derby di Roma o Derby della Capitale es el partido que se disputa entre la Associazione Sportiva Roma y la Società Sportiva Lazio por el dominio de la capital italiana. Un partido donde distintas vertientes convergen para dar como resultado un espectáculo que se vive más allá de lo que sucede durante los 90 minutos.
Las águilas y la loba
Una de las más feroces rivalidades no solo de Italia, sino de toda Europa, e incluso del mundo, surgió en 1927, precisamente el año de fundación de “la loba”. Previo a este año, cuatro equipos convivieron en la capital italiana, hasta que finalmente en verano de 1927, el Alba – Audace, Fortitudo Pro Roma y el Roman Football Club se fusionaron para crear lo que hoy conocemos como AS Roma.
Manejando los hilos detrás de esta fusión estaba el Partido Fascista, quienes bajo las órdenes de Benito Mussolini, buscaban un único equipo para la capital del país. El propósito público fue crear un equipo fuerte para “desafiar el dominio” de los equipos del norte de Italia como Juventus, Milan, Torino e Inter.
Un objetivo no tan discutido públicamente, pero igual de importante para Mussolini, era tener una Italia fuerte y unida bajo los ideales del fascismo. El futbol y en especial, un equipo unificado y representativo de la capital era el instrumento perfecto para fortalecer y reflejar sus ideales políticos con el público italiano.
“Il Duce” apoyó fervientemente al político Italo Foschi (primer presidente de la Roma), quien se encargó de los preparativos para la consecuente fusión de los equipos romanos.
Estaba previsto que la Lazio, fundada en enero de 1900, también formara parte de esta fusión. Sin embargo, los socios del equipo, encabezados por el general fascista Giorggio Vacaro, aficionado y socio influyente de los “Biancocelesti” condicionaron la fusión.
Solo formarían parte del acuerdo si el nuevo equipo conservaba su nombre, colores y emblema. Los demás miembros se negaron y en ese momento, comenzó la tensa y brutal rivalidad de la ciudad de Roma.
Sangre de gladiadores
A través de la historia se han presentado una serie de acontecimientos que han servido para avivar la llama de la pugna entre los clubes de la capital. Estos son algunos de ellos.
En 1932, el general Giorgio Vaccaro, quien fue vicepresidente de la Lazio, lanzó el balón lejos del terreno de juego para ganar tiempo, mientras su equipo ganaba frente a la loba por un marcador de 2-1. Viendo esto como un acto deshonroso, el jugador de la Roma, De Micheli, le propició una cachetada al general, quien no dudó en responder a golpes.
Esto detonó una gigantesca revuelta dentro del terreno de juego, siendo finalmente calmada por oficiales de policía que, montados a caballo, separaron a los rivales. El partido continuó y la Lazio obtuvo su primer triunfo en un derby después de siete encuentros el 23 de octubre de 1932.
En 1978, Franco Storace (posterior ministro bajo el partido de Silvio Berlusconi), quiso demostrar la superioridad de la loba con un tifo de bengalas. Debido a que el dueño del taller de pirotecnia era un reconocido hincha de las águilas, Storace se disfrazó de sacerdote y habló con el dueño para adquirir alrededor de 400 bengalas.
El falso sacerdote le argumentó al dueño que necesitaba la pólvora para alumbrar las fiestas patronales de “Marzafora”. La compra se realizó, no obstante, el vendedor no se dio cuenta que “Marzafora” no era la celebración de un santo, sino un anagrama de “Forza Roma”, dicha frase fue iluminada en el día del derby.
Durante la temporada 2006-2007, el entonces entrenador de la Lazio, Delio Rossi, prometió a sus jugadores que si vencían a la Roma, él se bañaría en la fuente del Gianicolo en la capital italiana.
Lazio terminó venciendo 3-0 a la Roma y a pesar de las bajas temperaturas, el técnico cumplió su palabra. Se dice que alrededor de 40 aficionados de la loba se dirigieron a la fuente al término del partido y orinaron en ella.
Lamentablemente, también se han dado casos de violencia entre ambas aficiones. Incluso, pequeños grupos de ambas hinchadas se han encargado de buscar aficionados desprotegidos para apuñalarlos.
Roma, dos equipos, una ciudad
A pesar de que parezca imposible de creer, ambos equipos e incluso ambas aficiones se han unido para representar un bien mayor en la ciudad. En 2004, un rumor acerca de que un aficionado había sido atropellado por la policía afuera del Estadio Olímpico impulso a ambas hinchadas a actuar.
Los ultras de la Roma saltaron al terreno de juego y demandaron hablar con su capitán, Francesco Totti. Después de discusiones entre ambos equipos, el árbitro y la federación italiana de futbol, el partido fue pospuesto.
Otro caso fue el de noviembre 2007, donde el joven de 26 años, Gabriele Lizandri, estaba sentado en su coche mientras aficionados de la Lazio y Juventus se batían a golpes.
Por razones inciertas, recibió un balazo de un oficial de policía y murió. Ambas aficiones y sus equipos se unieron para hacerle frente a la autoridad italiana y conmemorar la muerte de Gabriele. La policía italiana trató de encubrir lo ocurrido ese día, sin embargo, la verdad salió a la luz de la mano de ambas escuadras.
El Derby de Roma o Derby della Capitale, es la culminación de expresiones culturales, políticas y sociales para los ciudadanos de Roma. “las águilas” y “la loba”; la clase privilegiada y la clase obrera; los de la periferia de la ciudad y los del centro; “los auténticos romanos” y la “Roma unificada”. Enfrentándose como auténticos gladiadores en un coliseo: el Estadio Olímpico. Pero unidos por una misma ciudad: Roma.
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Por: Mario Badillo / @n7mariobadillo