La historia de las Reggae Girlz es de adversidad y resistencia. Para 2014 se encontraban recaudando fondos para poder revivir a la Selección Femenil mayor, ya que si bien había equipos de mujeres a lo largo y ancho de Jamaica, no había ni recursos ni infraestructura para hacer funcionar un representativo nacional. O más bien un representativo nacional femenil. Los Reggae Boyz no han atravesado por esos problemas desde hace varios años.
Las Reggae Girlz bajo la tutela de Cedella Marley
Fue justamente en este escenario de adversidad que Cedella Marley ingresó en el mundo del futbol. Hija mayor de la Dinastía Marley, es actualmente cabeza de “Tuff Gong”, la casa disquera que fundara su padre en 1965 y que actualmente es considerada una de las más importantes en la industria del reggae a nivel mundial. Además tiene su propia marca de ropa, “Catch a Fire”. Afincada en Miami, recibió la noticia de que se estaban recaudando fondos para revivir a la Selección Femenil de su país, lo que hizo que descubriera que la federación de su Jamaica había decidido cortarles los fondos.
Ya completamente comprometida con el balón y su causa, Cedella comenzó a indagar cada vez más en esta situación. Viendo el profundo abandono en el que se encontraban las chicas, decidió poner manos a la obra: contactó a varias jugadoras y se dispuso a articular una Selección Femenil de Futbol.
La empresaria jamaiquina declaró que la situación no le parecía sorprendente, en gran parte debido a la atmósfera machista que domina sobre la isla. «Creo que a ellos les gustaría ver chicas en trajes de baño y falditas de tenis en vez de usar tachones e implementos de futbol«. Esta afirmación no puede sino ser confirmada por las historias de vida de varias de las Reggae Girlz.
La distancia entre las mujeres y el balón en Jamaica
La delantera Khadija “Bunny” Shaw dependía de que la lluvia arruinara la cancha donde los chicos iban a jugar. En ese caso iban a patear la pelota frente a su casa y ella podía verlos desde su ventana. No la dejaban jugar e incluso alguna vez alguien le preguntó si estaba consciente de que el futbol era un deporte para hombres. La mediocampista Sashana Campbell asegura que le daba temor desempeñarse demasiado bien, ya que al jugar únicamente con hombres (debido a la ausencia de espacios para mujeres), podían hacerla a un lado.
Durante aquel 2014 las Reggae Girlz sólo tenían un objetivo en mente: seguir existiendo. La situación era tal que, debido a que llevaban varios años sin disputar un partido oficial, ni siquiera entraban dentro de los rankings de la FIFA. El camino era a todas luces largo y la mayor de los Marley puso dinero de su bolsillo para impulsar a sus chicas.
También convocó a dos de sus hermanos más famosos para que ayudaran a generar visibilidad hacia las chicas a través de “Strike Hard”, un tema de dancehall. Además de esto realizaron una campaña de recaudación de recursos para poder volver. Todo esto funcionó, apenas.
Segunda desaparición y retorno
Sin embargo el retorno se dio en un ambiente que distaba demasiado del profesionalismo. Los viajes los realizaban en camionetas en condiciones lamentables, ellas mismas lavaban sus uniformes y entrenaban en su tiempo libre, cuando sus trabajos se los permitía.
Con estos antecedentes intentaron ingresar al Mundial de Canadá 2015 y a los Olímpicos de de Rio 2016. No tuvieron éxito en ninguna de las dos competencias, pero sentaban un antecedente. Para el 2016 la federación de Jamaica volvió a desaparecer el seleccionado femenil.
Ante esto, Cedella Marley empujó con todavía más fuerza un proyecto. Hue Menzies se sumó al proyecto como entrenador, a manera de voluntario, ya que no había recursos para poder pagarle por su labor. «Si los Marley están haciendo algo, es real» declaró. En esta segunda etapa, Cedella decidió desaparecer de la primera línea.
No dejó a su suerte a las Reggae Girlz, pero dejó de asistir a todos los encuentros y comenzó a apoyar desde las sombras. Involuntariamente había terminado por robar foco y consciente de que esto podía resultar contraproducente para su equipo, se hizo a un lado. Los reflectores debían ser para las chicas.
La mirada de la Federación de Jamaica
A pesar de nuevas adversidades lograron llegar al Mundial de Francia 2019. No sin sufrimiento, su ingreso se logró en una tanda de penales contra Panamá. Aún con todo esto, todas parecieran tener pleno conocimiento de que a pesar de que lograron una hazaña dentro del futbol de su país (segunda vez que Jamaica ingresa a un Mundial), su existencia como equipo, sigue en el filo.
Las declaraciones de los directivos jamaiquinos no hacen sino evidenciar que el camino más largo por recorrer se encuentra fuera de las canchas. Dalton Wint, secretario general de la federación reconoció que las Reggae Girlz estaban abriendo el camino, «Y sufrirán por ello» aseguró.
Según declaraciones de Wint, el hecho de llegar a un Mundial, hará que la forma de pensar de la gente de Jamaica cambie, al tiempo que asegura que «la verdad de todo esto es que responsabilizo a algunas mujeres porque no asisten a los partidos, no apoyan de la forma que deberían«.
Los adeudos
A todo lo anterior se sumó el escándalo generado por la ausencia de pago que sufrieron las jugadoras. Luego de que lograran ser el segundo combinado en entrar a un Mundial (el primer femenil), se esperaba que el apoyo por parte de su Federación comenzara a aumentar. Sin embargo, esto no fue así. Incluso hubo un adeudo por parte de la Jamaica Football Federation (JFF).
Según aseveró «Bunny» Shaw, las jugadoras firmaron un contrato a principios del 2019, que concluyó en agosto del mismo año. Sin embargo hasta principios de septiembre solamente habían recibido el cincuenta por ciento del pago. Esto obligó a las jugadoras a tomar medidas: bajo el slogan de «No Pay No Play«, las jamaiquinas aseguraron que no disputarán ningún juego si la deuda que tenía la JFF no era saldada.
Esto suponía que el combinado femenil de aquel país no vería acción en las eliminatorias olímpicas, que comenzaron el 30 de septiembre de 2019. A la campaña se sumaron no solamente las grandes figuras de las «Reggae Girlz«, sino también otras representantes de la comunidad del futbol femenil. El 23 de septiembre, finalmente recibieron el dinero que les correspondía.
Aunque parecía que el Mundial Femenil de Francia 2019 iba a ser el punto de quiebre en el que las jugadoras de Jamaica comenzarían a recibir un mejor trato, las cosas no han sido tan sencillas.
A tres años del Mundial de Francia 2019, ¿qué ha cambiado?
Después de su calificación al Mundial, sin importar que perdieron los 3 duelos de la fase de grupos y hubo 12 goles en contra y uno a favor, el sueño no terminó para muchas. Mucho menos para “Bunny” Shaw, actual jugadora del Manchester City en la FA Women’s Super League de Inglaterra.
La delantera y máxima goleadora de las Reggae Girlz comentó en entrevista para la BBC que acudir a una Copa del Mundo y conectar con jugadoras jamaiquinas más pequeñas fue lo que la motivó a seguir adelante.
Si nada la detuvo cuando tres de sus hermanos fueron asesinados en guerrillas vandálicas en su país, tampoco cuando quedaron fuera de la primera ronda de Francia 2019. “Teníamos el sueño de clasificarnos para un Mundial algún día, pero no éramos conscientes de lo mucho que eso podría cambiar las vidas de tanta gente en Jamaica”, dijo para la FIFA.
La mayoría de sus seleccionadas residen en el futbol estadounidense, recibiendo becas académicas que les permite entrenar con estructuras sólidas antes de reportar con el combinado nacional. Sin embargo, la propia federación sigue siendo quien limita su desarrollo.
Lorne Donalson tomó el puesto de Hue Menzies como entrenador, al ser parte del cuerpo técnico con el que acudieron a Francia 2019. Sin embargo, estuvo solo unos meses como estratega principal al tener problemas con la federación de Jamaica. Así que Vin Blaine fue nombrado como DT.
La constante lucha de las Reggae Girlz
Con Vin Blaine se prepararon durante la fase preliminar del Campeonato W de la Concacaf, mismo que está por celebrarse en Monterrey, Nuevo León, del 4 al 18 de julio. Calificaron al Premundial Femenil al ganar sus 4 partidos, anotar 24 goles y recibir tan solo 2.
Aunque uno de los objetivos a corto plazo estaba cumplido –calificar al Campeonato W de la Concacaf–, las jugadoras firmaron una carta pidiendo su renuncia. Al justificar que el desarrollo de la selección no era la adecuada, ni los entrenamientos, ni la planeación ni la capacidad de Blaine de dirigir al conjunto, a 2 meses del certamen.
En un primer momento, la federación se negó a aceptar la carta de las jugadoras para despedir al técnico en turno. Sin embargo, poco después terminó por salir del cargo y de nueva cuenta Donalson se hizo del puesto a inicios de junio, a un mes de su debut en el Premundial de la Concacaf.
El panorama actual de las Reggae Girlz
Aunque el futuro es desalentador por ser parte del Grupo A de la fase final del campeonato, junto a Estados Unidos, México y Haití, donde solo calificarán dos de estos al Mundial de Australia y Nueva Zelanda 2023, no consideran que sea imposible.
La falta de apoyo de su federación, como los gastos que no corrieron por su cuenta durante Francia 2019 y llegó a través de una colecta social, son de las grandes trabas que encuentran en el camino las jugadoras jamaiquinas. Aunque algunas de ellas juegan en la élite como “Bunny”, el desarrollo no es el mismo para las demás.
A tres años de su primera Copa del Mundo, siguen existiendo deficiencias estructurales en el balompié caribeño por parte de la federación. Por lo que de no calificar al certamen, se esperaría que los hombres de pantalón largo no vuelvan a cortar de tajo los apoyos económicos y programas de futbol femenil.
Para que no asistir al Mundial de Australia y Nueva Zelanda de 2023, no implique ser una condena a no participar en otro.
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Por: Alberto Roman y Samantha González