El club más popular de Israel, el Beitar Jerusalén ha dado un parteaguas. Por decisión de su presidente ha decidido quitar la norma de no fichar a jugadores musulmanes. Pero, ¿por qué es importante esta decisión? Lamentablemente el futbol de aquel país se encuentra marcado por una vergonzosa y lamentable muestra de racismo explícito por parte los ultras del Beitar Jerusalén, conocidos como “La Familia”.
Su historial de rechazo y odio hacia los árabes y musulmanes es larga, ejemplo de ello fue cuando en 2005 el jugador Abbas Suan iba a recibir un homenaje en casa del Beitar por su destacada actuación con la selección israelí, sin embargo, La Familia abucheo al futbolista por tener ascendencia árabe y terminaron por incendiar su coche. Más información sobre el tema en el siguiente video.
Otro caso parecido ocurrió en 2013 cuando Dzahabrail Kadiyev y Zaur Sadayev dos jugadores chechenos practicantes del islam arribaron a la escuadra, los integrantes de la familia mostraron su total rechazo. En un entrenamiento se encararon con los futbolistas, les escupieron e insultaron, la presión de estos seudoaficionados generó que se marcharan del club.
El Beitar siempre se ha deslindado de estas actitudes y su nuevo presidente Moshe Hogeg quiere dar una nueva cara al equipo. «El Beitar no es un club racista. A partir de hoy, la religión no será más un factor para la elección de jugadores para el club» fue la declaración de Moshe quien ha decidido fichar jugadores árabes y musulmanes para cambiar la imagen que se tiene de la escuadra.
Pero no solo se trata de dar una nueva imagen, sino de combatir estos ideales vergonzosos que como sociedad y aficionados nos compete. Hay que generar conciencia de que nuestras diferencias no son motivo de odio o vergüenza, sino una forma de darle diversidad al mundo; no existen religiones ni etnias superiores. Pero es lamentable que en en siglo XXI temas sobre racismo continúen presentes.
Por: Manuel Vázquez Laguna / @HayManolo