Un pueblo necesita una nación. Es lo que argumentaban políticos y eruditos en el siglo XIX, época durante la cual la idea del Estado-Nación creció de forma poderosa hasta convertirse en una realidad, y que hoy día sobrevive con los países que componen el globo terráqueo.
Sin embargo, los problemas que traía consigo fueron enormes. Se impuso a distintos pueblos, con diferentes lenguas y culturas. Ejemplo de ello fue el Imperio Austro-húngaro y Yugoslavia, naciones que terminaron por fragmentarse debido a que englobaban distintas culturas y de las cuales no se logró conseguir una identidad e unidad. En España un caso similar ocurre, Galicia, Cataluña y el País Vasco. Son tres comunidades autónomas que representan a pueblos ajenos a la Corona.
El caso vasco
El caso vasco es muy particular, su origen se remonta incluso hasta la Edad de Piedra. Es un pueblo que ha sobrevivido a cartagineses, romanos, musulmanes, y otros tantos más que invadieron la península ibérica. Navarra y el País Vasco son conformadas por pobladores que muchas veces no se sienten identificados con España. En el futbol esto se ve reflejado con los equipos como el Athletic Club y el Osasuna.
Los ultras del Athletic Club, los Herri Taldea Norte se consideran primero vascos que españoles, prueba de ello han sido sus contables actos en pro de Euskal Herria (la nación vasca) refutando todo lo relacionado con la Corona española. Incluso los seguidores más radicales del equipo han mostrado su descontento contra España pintando su himno en más de una ocasión, pues ellos prefieren defender la ikurriña (la bandera vasca) antes que nada, pero existe un sector, más pequeño y que se identifica más como español. Sin embargo, los habitantes del País Vasco se consideran así mismos como los más vascos aunque no siempre fue así.
Navarra
Por difícil de creer, Navarra es el núcleo original del pueblo vasco. Aún cuando su identidad como parte de esta población muchas veces no es reconocida por sus vecinos del País Vasco. Los Indar Gorri y Lizarra Taldea son los ultras del Osasuna, y al igual que sus homólogos del Athletic reivindican la lucha por un territorio independiente para los vascos, aunque se consideran menos abertzale, es decir, menos radicales, pues en su momento ellos no apoyaban al grupo terrorista ETA.
Tanto el Osasuna como el Athletic representan en gran medida las dos partes de nacionalismo vasco en las canchas. El primero tratando de recuperar todo lo que periodo tras 500 años de represión y persecuciones, la lengua, la cultura e intentando volver a generarse su identidad. Mientras que el segundo explota más su historia a pesar de que sus orígenes no están tan consolidados como los de Navarra y el Osasuna. Zmbas tratan de darse un identidad fuera de España. Para ellos el objetivo es unificar a todo los pueblos vascos y crear Euskal Herria, un país para ellos.
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Por: Manuel Vázquez Laguna / @HayManolo