Scroll Top
Brasil y sus hinchas: a favor de la democracia

Es uno de los países más poblados del mundo, la cuna de futbolistas talentosísimos, el único pentacampeón del mundo y por eso no es de sorprenderse que en Brasil el futbol tiene un fuerte significado social entre algunos jugadores, pero más entre sus aficionados.

Corría el año 1964, un golpe de Estado apoyado por Estados Unidos derrocaba al presidente João Goulart y con esto se terminaba el anhelo de un Brasil libre y democrático, pues en su lugar llegaría una dictadura militar apoyada por la iglesia católica y las élites empresariales y políticas que veían con miedo las políticas de izquierda de Goulart.

Para finales de los 60, las libertades individuales quedaron suspendidas y la censura y represión policial para los que su opusieran al régimen llegaron a su punto más alto. Fue algunos años después, que del lugar menos pensado, del que algunos intelectuales siguen considerando como una “distracción para el pueblo», comenzó a surgir la resistencia.

Imagen

La Democracia Corinthiana

Para la década de los 80, la población ya estaba bastante harta de tanto tiempo de represión, la gente comenzó a perder el miedo y a salir a la calle para protestar ante el régimen que había permeado su estilo de jerarquía en todos los ámbitos. Esto coincidió con el fin de la gestión de Vicente Matheus como presidente del Corinthians (segundo equipo más popular de Brasil) después de una pésima campaña.

El lugar de Matheus sería tomado por Waldemar Pires, quien designó al sociólogo recién egresado de la universidad Adílson Monteiro Alves como encargado de la administración del equipo de futbol, y junto con el talentoso Sócrates, armarían una revolución en el club.

A Monteiro y Sócrates se unirían los futbolistas Wladimir Rodrigues y Walter Casagrande. El Corinthians desafiaría a la dictadura militar tomando las decisiones del club mediante votaciones y esto iba desde comidas, patrocinadores, salarios, fichajes y hasta el parado táctico y el once titular. En las asambleas no solo participaban los jugadores, también lo hacían los preparadores físicos, utileros, masajistas y gente de mantenimiento, de manera que todas las voces fueran escuchadas.

Leer más Corinthians, el equipo de Lula Da Silva

Fue así que mientras la dictadura militar se resistía a no morir mediante una cruel represión, nacía la Democracia Corinthiana, que para sorpresa de muchos, le trajo grandes resultados al club, incluyendo el bicampeonato del campeonato paulista en 1982 y 1983, además de que se sanearon todas las deudas.

Por supuesto que la dictadura no vio con buenos ojos lo que estaba pasando en Corinthians y presionó a la prensa para criticar al equipo y su gestión. A pesar de esto, el club se mantuvo firme, e incluso, en vez de llevar un patrocinio al frente de su camiseta, el Corinthians portaba mensajes en contra del régimen.

Con la Democracia Corinthiana, las entradas en el Estadio Pacaembú eran muy buenas y además de dar un gran espectáculo, inspiraron a muchísimos aficionados a unirse a la lucha por la democracia.

Sócrates, Casagrande y Wladimir también participaron en manifestaciones e incluso el doctor llegó a tomar el micrófono para dar emotivos mensajes ante cientos de personas. Finalmente, la dictadura militar cayó ante la presión social en 1985 y se realizaron las primeras elecciones en 20 años.

Torcedores pela Democracia

En 2014, surgió el grupo “Torcedores pela Democracia”, un grupo de aficionados progresistas de varios equipos de Río de Janeiro. En 2019, con la llegada del ultra derechista Jair Bolsonaro a la presidencia de Brasil, la presencia de Torcedores pela Democracia y otros grupos aumentó en las calles.

“Los movimientos neonazis siempre fueron muy pequeños aquí, pero ganaron notoriedad con Bolsonaro, también gracias a la nueva simbología adoptada, como el vaso de leche o la música de Wagner. Ellos saben perfectamente a quién está direccionado este discurso neonazista”, mencionó Ronaldo Tavares, miembro de Torcedores pela Democracia.

Imagen

Durante el periodo de Bolsonaro llegó la pandemia de coronavirus y en plena crisis sanitaria, simpatizantes del presidente comenzaron a salir a las calles para pedir el cierre del  Parlamento y del Tribunal Supremo, además de que pedían que de nuevo se realizara el Acto Institucional N.º 5, y con él, el regreso de la dictadura militar.

En varias ocasiones, Bolsonaro expresó su apoyo a los manifestantes, lo cual causó tensión entre los 3 poderes y las críticas internacionales, pues además, Brasil era uno de los países más afectados por la pandemia y las aglomeraciones ignoraban las recomendaciones de la OMS.

La Resistencia vs Bolsonaro

Ante la indiferencia de los medios de comunicación, los Torcedores pela Democracia y otros grupos como Flamengo da Gente olvidaron sus rivalidades y no tuvieron más remedio que también salir a las calles, pero ellos para defender la democracia

Curiosamente, al igual que con la Democracia Corinthiana, la resistencia contra Bolsonaro surgió del futbol, pero en esta ocasión no nació de un jugador, si no de los hinchas.

“Los partidos de izquierdas están totalmente institucionalizados y solo luchan contra los actos antidemocráticos a través de acciones legales, que casi nunca prosperan. Los hinchas, en cambio, representan las clases más populares y excluidas, y son ellos los que salen de las periferias para luchar contra el fascismo”, mencionó un miembro de Flamendo da Gente.

Imagen

En Brasil cada equipo cuenta con varias torcidas o barras, algunas de ellas han cobrado relevancia en el ámbito social al defender la libertad y la democracia. Entre ellas se encuentra la Resistencia Alvinegra del Cruzeiro, la Gavioes da Fiel del Corinthians y otras hinchadas del Santos, Sao Paolo, Palmeiras y Flamengo.

En las últimas elecciones presidenciales, en donde Lula venció por mínima diferencia a Jair Bolsonaro, como partido de futbol, el activismo de las torcidas también tuvo relevancia, en un ambiente que estuvo por demás tenso, y aunque Lula es de izquierda, no hay que olvidar que las torcidas tomaron protagonismo por la institucionalización de las izquierdas ¿Qué rumbo tomarán estos grupos durante este periodo?

Por Diego Hernández / @diegohb4

Entradas relacionadas