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PSG

Esta historia no es como cualquiera, aquí la cenicienta existe, el patito feo se convirtió en un bello cisne y hoy tiene la oportunidad de consolidar un proyecto de esos que parecieran sacado de videojuego, así es el París Saint Germain y esta es la crónica de cómo llegó a ser uno de los mejores equipos del mundo.

Acostumbrados a arrebatar

El París Football Club fue fundado un 12 de agosto de 1970, de raíces humildes. Y, al ser el equipo representativo de una de las ciudades más importantes del mundo, siempre buscó los primeros planos algo que, bajo la estrella sobre la que se concibió, era muy difícil pensar que podría lograr.

Ante la premura, los malos resultados y la falta de capital, los dueños originarios hicieron una movida arriesgada y el modesto, pero muy rico, equipo de Saint Germain fue el blanco perfecto para las aspiraciones de unos ambiciosos franceses.

Fue así que, justo después de que la temporada 1969-1970 llegó a su fin, que el París FC le hizo una propuesta a los dueños del Saint Germain que no pudieron rechazar y la posibilidad de que la pequeña provincia francesa se viera representada por un equipo de la capital gala, y unos cuantos millones de francos, terminó por concretar la fusión y el nacimiento del Paris Saint Germain.

¿Y el éxito?

La movida era simple: el Paris Saint Germain estaba diseñado para ser el mejor equipo de Francia, pero ante el equipo del Olympique de Lyon y el poderoso Olympique de Marsella poco y nada pudo hacer el recién llegado y durante más de una década vivió a la sombra de los cuadros ya mencionados.

La decadencia de los años 80, plasmada con la partida de Michel Platini a la Juventus de Turín, y la buena inversión en el equipo parisino le permitió conseguir su primera estrella en la temporada 1985-1986 pero, para desgracia de los dueños, volverían a verse relegados ante las buenas canteras de sus rivales.

Algo faltaba en París, ¿pero qué? La inversión en la cantera era algo inimaginable, en ese entonces el PSG sufría de problemas económicos, sus figuras eran jugadores locales y la posibilidad de crear futbolistas propios, con toda la inversión que eso representaba, era prácticamente nula.

El PSG sufrió una década más y en los 90 encontraron el momento ideal para comenzar a plasmar su idea, la de crear al equipo más poderoso del mundo gracias a una inversión económica fuerte, fue así que armaron a una escuadra con refuerzos que terminaron siendo determinantes y lograron su segundo título en la temporada 93-94.

Fueron lejos cuando trajeron a los brasileños Valdo, Rai y Ricardo Gomes, pero la inversión fuerte y donde se notaron las intenciones de los dueños fue cuando contrataron por casi siete millones de euros al liberiano figura del AS Mónaco, George Weah..

La inversión no paró, siempre buscaron replicar el éxito conseguido en esa temporada pero los fichajes no eran para armar un equipo. Siempre se contrataron estrellas en solitario y el funcionamiento nunca fue el esperado incluso, en el año 2000 anunciaron a su primer gran fichaje Ronaldinho, siendo la Ligue One la única que no conquistó con un título liguero mientras jugó en el viejo continente.

¿Por qué la historia del PSG no es normal?

En el mundo del futbol hay equipos que prácticamente nacieron siendo grandes, el Real Madrid, el Manchester United, el AC Milan, el Bayern Múnich, entre otros. Clubes que son la muestra que para la grandeza se necesita sí o sí una buena cantera, apoyada con una buena cartera y ese balance, hasta la fecha, no lo ha encontrado el cuadro parisino.

En 2011, dos años antes de volver a cumplir veinte años sin un solo campeonato de Liga, Qatar Investment Authority compró el 70% de las acciones del cuadro francés, comprometiéndose sobre todas las cosas, a reconstruir al equipo con miras en igualar lo que el Marsella consiguió en 1997: ganar la UEFA Champions League.

En ese año comenzaron los fichajes, en la defensa llegó el uruguayo Diego Lugano, en mediocampo trajeron al que en ese momento era el mediocentro más cotizado de Europa: Javier Pastore y para redondear al equipo compraron al delantero galo Kevin Gameiro, pero aún así vivieron dos años más a la sombra del entonces cinco veces campeón de la Ligue One: el Olympique de Lyon.

Durante 2012 y 2013 el consorcio catarí obtuvo el 30% restante del equipo y con ese control absoluto no hubo quien detuviera el sueño de Nasser Al-Khelaifi y se anunciaron los fichajes de Thiago Silva, Ezequiel Lavezzi y del goleador sueco Zlatan Ibrahimovic, con lo que, después de 19 años sin obtener un campeonato, lograron su tercera estrella.

Pero para Al-Khelaifi, el éxito pasajero no era una opción y, con la mirada puesta en la Champions, siguieron armando el equipo ideal para ese objetivo, por lo que contrataron, entre otros jugadores, a David Beckham, Marco Verratti, Thiago Motta y a Julian Draxler, pero en nueve años el PSG ni siquiera logró acceder a una final de la competición europea más importante a nivel de clubes.

El fichaje más caro y la primera final

¿Qué le hace falta a un equipo ganador en la Liga para conquistar Europa? Al-Khelaifi sabía que le hacía falta un jugador determinante, aquel que apareciera en los momentos importantes y que prácticamente el solo fuera capaz de decidir un partido, le hacía falta una súper estrella pero, con estas figuras regadas por el resto de Europa, un fichaje así era muy complicado y extremadamente caro.

Al final el camino se iluminó, una luz para los dueños cataríes del PSG. Al cierre de la temporada 2016-2017, y luego de una de las eliminaciones más ridículas en la historia de la Champions, a los oídos de Nasser llegó el rumor de que Neymar ya no estaba feliz en Barcelona, que ya no quería vivir a la sombra de Lionel Messi y que estaba dispuesto a escuchar ofertas de otros equipos.

Ahí estaba ese jugador que necesitaba, esa era su figura y quedaba claro que si querían dar un golpe determinante en la mesa y sentarse junto a los enormes de Europa, este era el momento. En el verano del 2018, Neymar fue anunciado como nuevo jugador del Paris Saint Germain, luego de pagar 222 millones de euros al FC Barcelona, y fue presentado en la Torre Eiffel de la ciudad luz.

A este fichaje se le agregó el préstamo con opción a compra obligatoria de Kylian Mbappé, procedente del AS Mónaco, con lo que tenían el equipo para lograrlo, pero en los años siguientes, el Real Madrid junto al Liverpool, reclamaron su puesto en la historia, dejando de lado tal inversión.

En 2020, una temporada atípica marcada por el COVID-19, el PSG encontró su cita con la historia, ¿en frente? Nada más y nada menos que la poderosa maquinaria bávara del Bayern Múnich, equipo que, dirigido por Hanz Dieter Flick y comandado por Thomas Müller, así como por Robert Lewandowski, los dejaron tendidos en el terreno del Estadio Da Luz en Portugal, pero al menos, el panorama ya pintaba mejor.

La evasión a UEFA y el fichaje del siglo

Hoy se sabe que al Paris Saint Germain la FIFA y la UEFA no pueden multarlo por el Fair Play Financiero, ya que el país galo, como favor a Catar, ha decidido no interponer sanciones por este delito hasta 2023. Ahora, todo está puesto sobre la mesa para que Lionel Messi sea nuevo futbolista dell Paris Saint Germain sin ningún tipo de restricción.

El objetivo es claro: Mbappé, Neymar y Messi para ganar la Champions. Los petrodólares hicieron su trabajo y con el vigente Campeón de Copa América en sus filas, ya tienen los necesario para buscar ganar, más que nunca, el certamen que desde el año 2011 se les ha hecho esquivo. Aora, en apariencia, no hay nada ni nadie que pueda quitarles de ese camino, pero como dicen, las cuentas se hacen en mayo.

 

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Por: Marcos Olvera / @MarcosOlvG

 

 

 

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